Hacemos conversaciones, creamos espacios de aprendizajes.
“Francisco, estoy cansado… lo cierto es que tengo años siendo “buen padre”, “buen esposo”, “buen amigo”, y estoy cansado de dar, poner, aportar…en ocasiones siento que estoy vacío, pero vuelvo a recargar…toca”
“De nada ha servido, mis hijos no me hablan…con todo lo que he hecho por ellos y ahora…he criado príncipes y princesas…”
“Francisco, lo que yo quería era irme a vivir a “la montaña”, tener un espacio en ese lugar desde el cual trabajar, pero ni siquiera pienso en proponerlo en casa porque se me vienen todos encima, los temas de mi esposa, mis hijos”.
“Si se pudiera, abriría un sitio de comida gourmet, arte, poesía…” pero ¿si eres chef y artista que te detiene?… “es que Francisco, seguro que se requiere mucho dinero”.
“Ya no quiero seguir, pero los hijos, el tiempo y sacrificios que ella ha hecho…”
“Todo esto lo hago para vencer el tedio de esa relación… lleno mi día, mi tiempo, mi vida, de trabajo, distracciones y lo que sea, para llegar cansado a casa”
“Tengo mucho miedo de emprender, se que puedo hacerlo pero si fallo, le fallo a mi familia…prefiero quedarme un poco más en la empresa, aunque haya que aguantar…”
“No estoy seguro de que mis hijos acepten a mi pareja, me da mucho miedo perderlos”
“Mis padres no esperan menos de mi…”
Son expresión de cansancio, de tristeza, de resignación frente a los mandatos asociados con lo que “debe ser y hacer un hombre”, con las consecuencias, mentales, físicas, emocionales y espirituales que ello implica.
Señalan la necesidad de un “Segundo Aire”. Pero ¿qué es un “Segundo Aire”?.
Un “Segundo Aire” es la posibilidad de alimentar la vida de nuevo aire, y llevarlo a nuestra vida de una manera diferente.
Un “Segundo Aire” es…
“Segundo Aire” es un proceso de transformación, un viaje de trabajo personal para que mejores la calidad de tu vida, de tus relaciones contigo y con las demás personas; y con ello, tu bienestar físico, mental, emocional y espiritual.
Quizás te estarás diciendo ¡otra propuesta de auto ayuda o de pensamiento positivo!.
Déjame decirte lo que NO es “Segundo Aire”.
“Segundo Aire” NO es un espacio en el que suceden milagros como consecuencia de que un “maestro” te imponga las manos; tampoco es un espacio de adoctrinamiento acerca de alguna ideología en particular, porque aun teniendo nuestro marco de referencia, el mismo sirve al propósito de conducir la actividad de una manera inclusiva e incluyente.
Tampoco se trata de un retiro religioso; si se trata de un proceso en el que profundizamos en tu esencia, en aquello que más y mejor te representa, eso que algunos llaman alma, otros llaman espíritu, otros llaman consciencia.
No somos portavoces del pensamiento positivo “per se”. Nada más lejos de eso. Por el contrario, cultivamos el pensamiento crítico, el pensamiento sistémico, integrando además el mirar hacia adentro, de manera consistente, respetuosa, al ritmo de cada hombre participante.
Finalmente, “Segundo Aire” no se trata de una intervención mágica en que en una jornada resuelves lo que otros no han resuelto en años de terapia, o en la que cambia tu vida por completo; si bien la magia sucede, esta es el resultado del compromiso del participante en trabajar en si, en conectar consigo y en comprometerse para construir (ahora si) pilares de lo que será su segundo aire, la segunda parte de su vida, una diseñada en alineamiento con lo más importante, una en la que te pongas en primer lugar.
Te proponemos un viaje cuidado, en un espacio seguro para:
Sabemos que el exceso de control nos ha cobrado un precio alto, mas, tratándose de un viaje tan importante (el viaje hacia adentro de ti) nos parece importante darte algunas pistas de cómo lo haremos y que tipo de cosas haremos.
Como hemos dicho antes, “Segundo Aire” no es una actividad puntual en la que una especia de “imposición de manos” te “alivia” ; se trata de un proceso compuesto por los siguientes momentos: